“A partir de hoy, por voluntad del pueblo de México, soy la Presidenta Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. Gobernaré para todas y para todos, tengan la certeza de que pondré mi conocimiento, fuerza, historia y mi vida al servicio del pueblo y de la patria.
Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de presidenta de la República que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la unión. Y si así no lo hiciere, que la nación me lo demande.”